Se trata de un hombre de 59 años, quien padeció varias enfermedades y no presentaba antecedentes de exposición a aves de corral u otros animales.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) dio a conocer este miércoles que se confirmó la primera muerte de un ser humano por gripe aviar AH5N2 en todo el mundo, caso que se detectó en México y a partir del cual, hasta el momento, no existe riesgo de contagio.

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A través de su sitio web, la agencia sanitaria global especificó que se trata de un hombre de 59 años, residente en el estado de México (centro), quien no presentaba antecedentes de exposición a aves de corral u otros animales y había padecido enfermedad renal crónica, diabetes tipo 2 e hipertensión arterial sistémica de larga evolución.
Según sus familiares, a partir del 17 de abril pasado desarrolló fiebre, dificultad para respirar, diarrea, náuseas y malestar general, por lo cual ingresó una semana después al Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) Ismael Cosío Villegas, donde murió ese mismo día tras agravarse.

Una muestra de sangre fue procesada en el Laboratorio de Biología Molecular de Enfermedades Emergentes del Centro de Investigación en Enfermedades Infecciosas del INER. Dio positivo a influenza tipo A.
Poco después se analizó en el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos, que confirmó que se trataba de la influenza tipo AH5N2, la cual es considerada de baja patogenicidad. Así, las autoridades sanitarias mexicanas informaron el 23 de mayo pasado a la OMS sobre este caso.
Durante las últimas semanas se han reportado contagios con el virus de gripe aviar AH5N1 en vacas pertenecientes a granjas lecheras de los estados de Texas (sur) y Kansas (centro), en EE.UU. Antes se reportaron otros en Michigan (norte). Esta variedad es muy contagiosa entre aves.

No existe riesgo de contagio a humanos

Este jueves, a través de un comunicado, la Secretaría de Salud de México informó que se tomaron muestras a todos los contactos identificados del fallecido y dieron negativo.
Agregó que se llevó a cabo una investigación epidemiológica exhaustiva, con participación de numerosas agencias federales, que incluyó la búsqueda intencionada de casos con enfermedades respiratorias virales, y no se pudo identificar una fuente de infección.
A partir de estos y otros elementos, el ente aseguró que no existe riesgo de contagio para la población, y que el consumo de pollo o huevo bien cocido no representan un peligro.
Esta influenza aviar se ha detectado en aves silvestres y domésticas. Hasta el momento no se dispone de evidencia que apunte a posible transmisibilidad entre seres humanos.

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